Durante largos años he publicado varios trabajos originales, los cuales están bajo Derechos de Autor y diversas licencias en Internet, así que como es normal demandaré a todo aquel que publique algún contenido de mi blog sin mi permiso.
No sólo el contenido de las entradas es propio, sino también los laterales. Son poemas algo antiguos y desgraciadamente he tenido que tomar medidas en más de una ocasión.

Por favor, no hagan que me enfurezca y tenga que perseguirles.

Sobre el restante contenido son meros homenajes con los cuales no gano ni un céntimo. Sin embargo, también pido que no sean tomados de mi blog ya que es mi trabajo (o el de compañeros míos) para un fandom determinado (Crónicas Vampíricas y Brujas Mayfair)

Un saludo, Lestat de Lioncourt

ADVERTENCIA


Este lugar contiene novelas eróticas homosexuales y de terror psicológico, con otras de vampiros algo subidas de tono. Si no te gusta este tipo de literatura, por favor no sigas leyendo.

~La eternidad~ Según Lestat

jueves, 4 de febrero de 2010

Dark City - Capitulo 12+1 - Dolor, sólo dolor (VII)


Estuvimos esperándola diez minutos más de la hora acordada. María ya se había marchado y estábamos a solas con el niño. Finalmente tocaron al timbre y escuché a lo lejos como la perra ladraba dejándose los pulmones, él se levantó y abrió la puerta para hacerles pasar; yo estaba con Jun en el sofá jugando con uno de sus sonajeros. Tomé al pequeño en brazos y me levanté mostrando una de mis mejores sonrisas.

-Señorita Blue.-dije estirando mi mano para estrechar la suya.-Espero que les haya sido fácil encontrar la vivienda.

-Lo fue, aunque había cierto atasco en una de las vías principales de la ciudad.-comentó enmarcando una sonrisa falsa, porque esa mujer era fría como el hielo y no era afable.

Se personaron frente a nosotros un iluminador, un fotógrafo y un joven aprendiz. Todos eran muchachos jóvenes y parecían nerviosos por la oportunidad que se presentaba. Ella sin embargo tenía unos cincuenta años, aunque aparentaba algunos menos, y su aspecto era frío. Clarissa era mucho más elegante, menos fría y estirada. Jamás había estado por lo tanto ante una persona que me helara tanto la sangre.

-Chicos acondicionar esto para las fotografías mientras comienzo con la entrevista.-dijo dejando la grabadora sobre la mesa.

-Quiero que sepa que si esta entrevista se ve manipulada tomaré acciones legales que me parezcan oportunas, también que tengo cámaras de seguridad instaladas en toda la casa y pueden usarse como prueba.

Ella se quedó estática observándome sin saber qué decir o qué hacer. Conocía bien sus tácticas y contraatacaba antes que ella empezara.

-Está bien, pero me ofende al ser tan reticente.-comentó sentándose en una de los sillones.

-Amo la privacidad.-respondí.

-Es algo obsesivo en ese aspecto.-dijo Phoenix.-Porque tenemos razones para ello.

-Está bien, es un hombre precavido.-murmuró sacando una libreta y un bolígrafo.-Antes de empezar deseo agradecerle que haya confiado en la revista y que brinde un poco de su privacidad a nuestros lectores.

-Yo sólo espero que sean profesionales.-dije mirándola fijamente sin perder detalles.

-Bien, empecemos.-cruzó sus piernas y me sonrió, yo simplemente respondí la sonrisa de la misma forma. Jun balbuceaba estirando sus brazos hacia los cables de las cámaras. Phoenix finalmente lo recostó en su parque de juegos, porque sabía que no dejaría tranquilo a los chicos y acabaría pataleando.-Es un hombre que ha dado un cambio radical a su vida, ha trazado rumbos muy distintos a los que tenía marcado hace tan sólo un par de años y su popularidad se ha incrementado. Usted es objeto de la prensa cada semana prácticamente ¿cómo vive usted este acoso señor Sakurai?

-No lo vio.-respondí rápidamente.-Siempre he sido el blanco de los fotógrafos, micrófonos, cámaras y demás compañeros de su profesión. Algunos son grandes profesionales, me parecen críticos con ellos y con el mundo. Es algo que admiro en las personas, la autocrítica, y no suele darse, al igual que la humildad y el amor al trabajo. Así que suelo ver, leer y escuchar lo justo sobre mí en los medios.-sonreí notando que mi pareja se sentaba a mi lado, de inmediato le tomé de la mano y la mantuve entre las mías.-Cuando salgo a pasear lo hago en zonas donde no esté rodeado de prensa, porque cualquier gesto mío es filmado y comentado. Siempre intento estar fuera de vuestro alcance.

-Comprendo, es algo que de puede molestar horriblemente sobretodo cuando camina junto a su pareja o sus hijos.-comentó con una sonrisa aún más falsa que la anterior.-No hemos podido saber sus declaraciones sobre el porque este cambio de sexualidad, mentalidad y política. Ahora que estamos frente a frente deseo hacerle la siguiente pregunta.-sabía de qué iba y tenía la respuesta preparada.-¿Cómo es que decidió dejar a su esposa para contraer matrimonio con mi joven compañero de profesión.

-Primeramente deseo decirle que uno no cambia su sexualidad, desde joven fui bisexual y tuve que ocultarlo por presión social y familiar.-la miré fijamente a los ojos.-No puede hacerse a la idea la presión que puede tener una persona, los motivos que le hacen tomar decisiones, y finalmente encerrarse en una cápsula de falsedad para sobrevivir.-jugueteaba con los dedos de Phoenix porque eso me tranquilizaba, mientras notaba como su cabeza estaba apoyada en mi hombro.-Los años que viví junto a Clarissa de la Rosa fueron algunos de mis mejores años, me dio dos hijos y me hizo crecer como persona. Sin embargo, cambié mucho por estar con ella, por ser el marido que todos deseaban a su lado y abandonar mis sueños.-hice un inciso.-Y si estoy casado ahora con Phoenix es porque dejé de amar lentamente a mi mujer, mis responsabilidades enfriaron la pasión y quedó únicamente el cariño. A día de hoy tengo buena relación con ella, ya que siempre será alguien importante en mi vida, y le deseo lo mejor de esta vida.-sonreí de forma franca, cosa que esa mujerzuela no había aprendido en sus años de profesional competente.-Me casé con Phoenix porque me enamoré y uno no elije de quien se enamora. Retomé mi antigua ideología, retomé algunos de mis sueños y mi proyecto familiar cambió.-dejé un beso sobre los cabellos de mi pareja y sonreí.-¿Usted jamás ha estado enamorada? Todos cuando estamos enamorados hacemos cualquier locura, la mayor de todas ellas, y terminamos rindiéndonos a la pasión.

-Interesante.-intervino al fin mientras el chico que ayudaba con la iluminación reía tras ella.-En esta nueva aventura decidió adoptar a su pequeño hijo ¿fue decisión de ambos?

-Usted se distingue como una profesional ¿cierto?-interrogué alzando una ceja.

-Sí, así es.-respondió enérgica con una sonrisa en los labios.

-Si usted fuera una profesional hubiera investigado un poco, ya que hace algún tiempo su propia revista sacó que había adoptado a mi sobrino por la muerte de sus padres. Jun es parte de mi familia desde su nacimiento, no fue algo premeditado y a Phoenix le tomó por sorpresa.

-Así es.-dijo mi pareja con un tono dulce que demostraba felicidad.-Jun se ha convertido en mi luz, en mi guía los días que trabajo en casa y también un fuerte apoyo en seguir luchando con mi enfermedad. A pesar de ser un niño obra milagros en mí y en todos. Pero él no viene de una adopción corriente, sé que la genética de los Sakurai está en él y creo que por ello es tan especial. Tanto Atsushi como todos sus hijos me han mostrado lo ingeniosos, atentos, dulces, cercanos y talentosos que pueden ser.

-Vaya, no sabía que todo eso podía hacer un niño que a penas sabe balbucear.-aquello me molestó.

-Hay niños que poseen más humanidad que muchos adultos de sonrisa frívola.-el fotógrafo y el iluminador se carcajearon sin remedio por mi intervención.-Quiero que sepa que no voy a permitir que insulte a mi hijo pequeño, como tampoco al resto.

-¿Ni a su reciente hija? Pues ha llegado a nuestros oídos que tiene una hija de casi veinticinco años.-comentó con una sonrisa autosuficiente.

-Sí, así es. Ella es fruto de una relación anterior a Clarissa y de la cual no tenía noticia de su nacimiento hasta hace aproximadamente un año.-lo hice con el orgullo de un padre.-Nada más saber que ella existía la tomé como hija y he de decir que me siento orgulloso de mis genes. Es una chica con talento para la música y con una carrera finalizada.-reí bajo y besé la mano de Phoenix.-Aunque tiene mi mal humor cuando tocan lo que es suyo, sobretodo cuando molestan a parte de la familia.

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Lestat de Lioncourt