Durante largos años he publicado varios trabajos originales, los cuales están bajo Derechos de Autor y diversas licencias en Internet, así que como es normal demandaré a todo aquel que publique algún contenido de mi blog sin mi permiso.
No sólo el contenido de las entradas es propio, sino también los laterales. Son poemas algo antiguos y desgraciadamente he tenido que tomar medidas en más de una ocasión.

Por favor, no hagan que me enfurezca y tenga que perseguirles.

Sobre el restante contenido son meros homenajes con los cuales no gano ni un céntimo. Sin embargo, también pido que no sean tomados de mi blog ya que es mi trabajo (o el de compañeros míos) para un fandom determinado (Crónicas Vampíricas y Brujas Mayfair)

Un saludo, Lestat de Lioncourt

ADVERTENCIA


Este lugar contiene novelas eróticas homosexuales y de terror psicológico, con otras de vampiros algo subidas de tono. Si no te gusta este tipo de literatura, por favor no sigas leyendo.

~La eternidad~ Según Lestat

martes, 20 de septiembre de 2016

Amor desde el primer momento

No sé qué sentí cuando te vi por primera vez. Creo que me dio un vuelco en el corazón y mis manos se aferraron firmemente en la barandilla donde estaba situado. Había llegado al hostal hacía tan sólo unas semanas en busca de soportar la muerte, su corto y sufrido recorrido, junto a mi padre. El yacía en la habitación contigua tosiendo, sintiéndose morir sin morirse, por el contrario yo parecía gozar de una buena salud, posición y grandes deseos que no lograba sofocar. Quería alejarme de él, de su hedor de moribundo y sus palabras victimista sobre el amor, el respeto y la necesidad que tenía hacia mí.

Había surcado los mares para vivir una gran aventura, recorrí ciudades que hoy en día están prácticamente desaparecidas. Incluso estuve en Londres antes del gran incendio que arrasó distritos completos, dejando humeante y destruida aquella hermosa vista desde el río. Caminé por el desierto, lloré frente a una lápida sin cuerpo y tuve que decir adiós a mi madre. Ella quiso recorrer mundo a solas. Yo, por el contrario, no sé vivir en soledad; y, mucho menos, soportar el dolor de la pérdida de un ser amado.

Cuando nos encontramos tú habías perdido a tu hermano, el cual significaba demasiado para ti, y yo había perdido a Nicolas. Ambos sufríamos ciertos remordimientos que latían como mariposas oscuras sobre nuestras almas. Por eso, cuando te vi, sentí que te necesitaba. Supe que eras el idóneo. Vi en tus verdes esmeraldas la tortura de una vida insatisfactoria. Comprendí que debía tomarte entre mis brazos y ofrecerte la vida eterna. Tú la merecías más que nadie en esta ciudad. Tenía que mostrarte la belleza ecléctica de la noche.

Bajé de inmediato, dejando a mi padre solo, y recorrí las calles detrás de tu espalda algo estrecha, de figura esbelta y elegantes pisadas. Podía ver en ti la hermosura de París, lo bohemio, de tantos y tantos poetas frustrados y músicos malditos. Aspiré tu filosofía decadente y amé esos labios ligeramente fruncidos. Quería besar tus mejillas y colar mi nariz entre tus oscuros cabellos. Sí, quería. Deseaba tocar esa maraña ondulada que caía elegantemente sobre tu espalda. Te imaginé desnudo, recostado en mi cama como un maravilloso premio de esta vida, y sentí escalofríos.

Siempre supuse que te convertí porque en tus ojos vi el dolor de Nicolas, al cual no logré salvar, pero admito que también estaba enamorado de todas tus restantes virtudes. Esa melancolía eterna me hacía suspirar e imaginaba que lograba colocar una sonrisa en tu boca. Sí, lo imaginaba, Louis.


Por eso, amor mío, nunca voy a cansarme de ti porque te he amado desde el primer momento.


Lestat de Lioncourt   

1 comentario:

Senrou Chigusa dijo...

Perfecto <3
Estas memorias son amor puro ~
Gracias por compartirlo <\3
Saludos~

Gracias por su lectura

Gracias por su lectura
Lestat de Lioncourt