Durante largos años he publicado varios trabajos originales, los cuales están bajo Derechos de Autor y diversas licencias en Internet, así que como es normal demandaré a todo aquel que publique algún contenido de mi blog sin mi permiso.
No sólo el contenido de las entradas es propio, sino también los laterales. Son poemas algo antiguos y desgraciadamente he tenido que tomar medidas en más de una ocasión.

Por favor, no hagan que me enfurezca y tenga que perseguirles.

Sobre el restante contenido son meros homenajes con los cuales no gano ni un céntimo. Sin embargo, también pido que no sean tomados de mi blog ya que es mi trabajo (o el de compañeros míos) para un fandom determinado (Crónicas Vampíricas y Brujas Mayfair)

Un saludo, Lestat de Lioncourt

ADVERTENCIA


Este lugar contiene novelas eróticas homosexuales y de terror psicológico, con otras de vampiros algo subidas de tono. Si no te gusta este tipo de literatura, por favor no sigas leyendo.

~La eternidad~ Según Lestat

martes, 3 de agosto de 2010

Dark City - Capitulo 18 - Camino vital X


-Y no se lo hará, sólo deja que actúe.-susurré antes de besar sus labios.-Ve y dale el zumo, no quiero que te vea llorar porque él se sentirá aún peor. Yo iré al jardín, necesito relajarme un rato. Si necesitáis algo estaré meditando ahí fuera.-él asintió mientras le decía todo aquello en susurros.

Como dije me fui al jardín, me quedé sentado en el centro de este donde estaba el pequeño cenador. Allí quedé como ido pensando en las palabras de Kamijo, estaba seguro que encontraría una solución acorde las circunstancias. Era inteligente, muy inteligente, y actuaría con cautela, lo cual le daría doble fortaleza a todos sus pasos.

Phoenix vino junto a mí pasadas unas horas, se sentó a mi lado y terminó derrumbándose. Yo simplemente acaricié sus cabellos en silencio, era bueno que sacara todo pero no que lo hiciera frente a él. Me preocupaba que reviviera momentos que habíamos pasados, no era bueno recrearse en el pasado si no se sabe afrontar.

La cena no fue junto a Jasmine, él se quedó tumbado en el cuarto de invitados. Seth comió en silencio al igual que Phoenix. Yo simplemente intentaba relajarme tarareando bajo la última canción que habíamos logrado grabar, era mi forma de desconectar.

Cuando todos se acostaron yo decidí ir a mi despacho. Allí me senté para buscar algo como regalo para Anii, supuse que debía comprar algo más que lo acostumbrado. Siempre oí decir que un regalo no es un regalo si no es divertido, extraño, único, especial y pensado en la persona a quién vas a regalarlo. Buscaba por la red de redes, incluso en productos de segunda mano, cuando escuché que alguien tocaba a la puerta.

-Pasa.-dije sin quitar los ojos de la pantalla.-¿Jun está de nuevo molesto con los dientes?-pregunté pensando que era Phoenix, pero no era él.

-Soy yo.-susurró con la voz ronca, prácticamente afónico.-¿Puedo sentarme?

-Puedes.-respondí dejando la búsqueda para más tarde.

-No debí decir que era tu culpa.-dijo sentándose frente a mí, parecía sereno pero terminó rompiendo a llorar una vez más.

-Jasmine.-susurré estirando mis manos para tomar una de las suyas, estaban sobre la mesa y podía percibir como temblaba.-Seré sincero contigo.-dije con una sonrisa leve.-Ese niño no tiene la culpa, tampoco Kamijo aunque le intentes hacer ver que sí. Tiene culpa, pero no de forma consciente, por ello es inocente de todo lo que haga ella. Pero no creo que logre nada, no creo que consiga lo más mínimo. Comportándote así conseguirá que Kamijo se canse de ti y se acerque tal vez a ella. Bronca tras bronca no se arregla nada, es mejor estar en calma y meditar las cosas con cautela.-apretó mi mano entre las suyas.-Quédate aquí unos días, yo le diré que estás aquí pero que no venga hasta que tú lo desees.

-De acuerdo.-masculló asintiendo con su cabeza.

Apagué el ordenador y me levanté para salir con él del despacho. Tuve que acompañarlo a su habitación, puesto que seguía llorando. No sabía qué decir ante sus lágrimas. Phoenix se calmaba si estaba cerca, pero él huía de Kamijo y se refugiaba en nosotros.

En mi habitación Phoenix ya me esperaba, estaba dormido aferrado a mi lado de la almohada. Me tumbé a su lado y lo estreché entre mis brazos. Yo no pude dormir. Pensaba en cómo decirle a Kamijo que estaba con nosotros, que no podría verlo y que por favor ni apareciera hasta que se calmara. Entonces caí que él ya lo había dado por sentado, tal vez sus hombres incluso lo habían seguido. Así que tan sólo me quedé despierto porque la inquietud me impedía descansar.

Los ensayos del día siguiente se cancelaron y yo me quedé en la cama. Tenía sueño, estaba molido, y no pensaba levantarme hasta que estuviera totalmente repuesto. Pero los llantos de Jasmine se escuchaban en la pared contigua. No podía dormir escuchando aquello, consciente que lo estaba pasando mal. Entonces me duché y decidí ir al teatro.

Nada más llegar allí vi un revuelo intenso. El chico que tenía como secretario corría de un lado a otro por los pasillos. Yoshiki estaba también allí fumando y con ropa de armani, un traje que le hacía parecer muy masculino y serio. Mario estaba cruzado de brazos junto a dos chicos, uno lo reconocí ya que se presentó como Spider.

-¡Ya no puedo más!-exclamó el otro chico que estaba junto a Mario.

-Siéntate Sho.-dijo señalándole el asiento.-Sho, siéntate.

-¡No!-respondió.-¡Spider no podemos permitir que hagan eso!

-Kamijo es adulto, sabrá lidiar con esta situación al igual que Yoshi.-comentó Spider mientras jugueteaba con una consola psp.

-Tu hermano tiene razón.-comentó Mario antes de verme allí parado observando todo, más bien analizándolo.-Atsushi, no es buen día para visitas y es mejor que vayas a casa.-dijo caminando hacia mi.

-Vine a decirle a Kamijo que Jasmine está en mi casa y que no se encuentra bien, pero que es preferible que no aparezca por allí.-dije sin dejar de ver a esos dos discutir como hermanos.

-¡Niños no os veo pero os escucho!-exclamó Mario y ambos quedaron paralizados.-No es hora para andarse con juegos, id donde Teru y calmarlo. Después, por favor, id por un botellín de cerveza estoy seco.

Los chicos accedieron a su petición y corretearon por el pasillo hasta llegar donde Teru, este tan sólo terminó llorando desconsolado. No sabía que sucedía allí, pero parecía que había ocurrido algo importante.

1 comentario:

Athenea dijo...

¡Hola! He estado leyendo tu blog y me parece muy interesante. Creo que posees una sensibilidad genuina a la hora de describir a los personajes y sus sentimientos y un gran talento para la escritura. Ojalá algún día yo pueda llegar a ser al menos la mitad de buena que tú. Además, admiro tus agallas para expresar lo que sientes sin tapujos ni inhibiciones, pero siempre desde el respeto. En fin, que me encanta tu blog, sigue así!!

Gracias por su lectura

Gracias por su lectura
Lestat de Lioncourt