Durante largos años he publicado varios trabajos originales, los cuales están bajo Derechos de Autor y diversas licencias en Internet, así que como es normal demandaré a todo aquel que publique algún contenido de mi blog sin mi permiso.
No sólo el contenido de las entradas es propio, sino también los laterales. Son poemas algo antiguos y desgraciadamente he tenido que tomar medidas en más de una ocasión.

Por favor, no hagan que me enfurezca y tenga que perseguirles.

Sobre el restante contenido son meros homenajes con los cuales no gano ni un céntimo. Sin embargo, también pido que no sean tomados de mi blog ya que es mi trabajo (o el de compañeros míos) para un fandom determinado (Crónicas Vampíricas y Brujas Mayfair)

Un saludo, Lestat de Lioncourt

ADVERTENCIA


Este lugar contiene novelas eróticas homosexuales y de terror psicológico, con otras de vampiros algo subidas de tono. Si no te gusta este tipo de literatura, por favor no sigas leyendo.

~La eternidad~ Según Lestat

miércoles, 10 de diciembre de 2014

Un amigo fiel

No puedo decir que te encontrara, aunque me animo a pensar que ambos nos cruzamos en uno de esos momentos indicados. Tú necesitabas a alguien urgentemente para dar tu amor, y yo necesitaba a alguien que me ayudara a cruzar los límites entre la noche y la humanidad. Me enseñaste que ser humano no es ser un hombre mortal, sino tener el corazón y el arrojo suficiente para amar sin límites. Permitiste que besara tu frente, acariciara tu suave pelaje y te mirara a los ojos completamente embelesado. Cuando era joven los animales me rodeaban. Me sentía libre y parte de ellos. Mis mastines, mis caballos y los diversos animales que se interponían en mi vida parecían decirme que yo era el rey de la manada, un león digno de ser el señor de esas tierras y de la bestias que siempre pedían mi valor. Y no, cuando digo bestias no me refiero a los ciervos y conejos. Cuando digo bestias me refiero a los pueblerinos que reían con la boca llena jactándose de su poderío sobre los bueyes, caballos y diversos animales.

¿Qué puedo contarte? Amigo mío, hay tantas cosas que ya sabes. Me conociste bien cuando te miré a los ojos. Comprendiste cada partícula de mi alma. Te dejaste guiar por algo más que mis aterradores colmillos. Has tenido una vida larga y has conocido el amor. Puedo demostrarlo porque yo te he amado, la mujer que te cuidaba lo hizo con tanta pasión como yo mismo y tuviste tus parejas dando futuros hombres de cuatro patas como tú.

Ya lo dije muchas veces, Mojo, y es que todos deberíamos ser perros. El ser humano debería ser perro. Si naciéramos perros seríamos bondadosos y tendríamos la capacidad de escuchar que ustedes tenéis. Una bondad infinita. Al ser humano le falta bondad. A mí me falta bondad. Es algo que ya parece escasear. Sin embargo, tú siempre mostrabas esa bondad en cada una de tus acciones.

Te extraño, pero te veo en cada descendiente que has tenido. Contemplo a los nuevos Mojo que corren por las calles de esta ciudad. Puedo verlos tan valientes, bondadosos y amables como tú. Me han lamido el rostro, abrazado al verme y, juraría por todo lo que tengo y mi propia cordura, que me hablan de ti cuando nos cruzamos. Amigo mío, he sufrido lo indecible por ti y tú por mí. Ambos nos hemos amado desde que tuvimos la dicha de conocernos.

Alguien te compró en una hermosa tienda de mascotas, te puso un nombre que no era el que yo te di, te vio crecer y te echó a la calle como si no valieras nada. Pero tuviste la bondad, esa bondad implícita en vosotros los animales, de confiar y amar de nuevo. Por eso mismo tú eres mi héroe. Tú eres el verdadero héroe de mis aventuras menos conocidas. Me ayudaste a cambiar, a recordar que era ser humano de verdad y por eso, así como por tu amor, siempre te llevo conmigo y jamás podré olvidarte.

Te amo amigo mío.

Lestat de Lioncourt

-----

Dedicado al amor y el valor de rescatar animales que tiene Gabrielle, mi pareja... mi Rowan. Pero también a todos los Mojo del mundo que esperan ser adoptados, ya que alguien los tiró a la calle. En homenaje a Xena, que en paz descanse, y a los amigos que aún poseemos todos los administradores de las distintas páginas del Jardín Salvaje. 

No hay comentarios:

Gracias por su lectura

Gracias por su lectura
Lestat de Lioncourt