Lasher, poema y nada más.
Lestat de Lioncourt
Mírate. Mírate bien.
Mírate más allá del espejo
y observa tus arrugas,
las ojeas que han salido
esta noche, como las anteriores,
junto a tu mirada triste.
Ya lo sabes, lo notas.
Te estás haciendo viejo
y aún no te subyugas.
Has aprendido de lo vivido
y de cada uno de los errores
pero cada día es un quiste.
Mírame. Mírame bien.
Yo sigo igual sonriendo
esperando que tomes mi mano,
dejando que la música suene
y esperando mi momento.
Un momento que aún no llega.
Me conoces, pero no.
He estado siempre viviendo
pegado a tu sombra, a tu lado.
Agitando las nubes, haciendo que
llueve,
y dejando en ti miles de tormentos.
La familia tiene mi huella.
No hay comentarios:
Publicar un comentario