Gankutsuou, El Conde de Montecristo, sacada el google pero supongo que es de deviantart.
Dedicado a mi pareja
Morirás para Vivir en las sombras.
Dame tu calor
Dame tu vida
Dame tu sangre
Y yo te daré la vida en la muerte
La paz de un ataúd, el deseo del asesino
Y sobretodo, el honor de ser la mano derecha del diablo.
Yo soy tú, tú eres yo, y no hay nada más que hablar.
No importa cuantas veces reces por tu salvación, eres peor que el mismísimo demonio y tan sensual que me haces caer a un pozo de sensaciones extrañas.
Si Dios existiera, o al menos hiciese acto de presencia para creer, te sonreiría y te mandaría al infierno.
Yo seré un vampiro, un viejo asqueado con la soledad y casado con la amargura, pero tú eres un ser venenoso.
Sin embargo, quiero tu veneno.
Necesito tu presencia.
Tu sangre.
Tu vida.
Tus palabras en momentos inoportunos y tus silencios en los instantes más necesarios.
Sé que me amas.
Que me esperas.
Que me sueñas.
Y que ayer compraste ropas mortuorias por si hoy iba en tu búsqueda.
Es de noche.
Son las doce en mi reloj.
Despierto tras una pesadilla y me sumerjo en otra.
La sed, la necesidad y la vena de tu cuello esperándome.
Mis dientes sobre tu piel, rasgándola, y el torrente de glóbulos rojos en mi paladar.
Sí, así mi amor.
Sí, así mi vida.
Sí, así.
“Cubrid su rostro, me deslumbra, ha muerto joven”
Susurran las gárgolas del campanario recordando poemas de Webster
Buscando quizás la frase que se grabará en tu lápida
Mientras tus carnes siempre estarán frescas, lozanas, y en compañía de mis manos.
Te guiaré al placer, palparás el infierno y el cielo a la vez.
Y de las sombras, pobres y simples, nacerá el rey de los infiernos.
De ellos tomará a su amante y darán vástagos a las tinieblas.
Estos, sembraran en
Por los siglos de los siglos, Amen.
En el nombre del amor,
De la sensualidad,
Y del poder.
Dame tu calor
Dame tu vida
Dame tu sangre
Y yo te daré la vida en la muerte
La paz de un ataúd, el deseo del asesino
Y sobretodo, el honor de ser la mano derecha del diablo.
¡Dame todo!
¡Lo necesito!
¡Porque te amo!
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