Bonjour mes amis
¿Les interesaría leer algo más de Avicus? Un nuevo texto suyo. ¡Pasen y lean!
Lestat de Lioncourt
En mi mente aún hay hueco para pensar
en ti. Pese a los años que han pasado sigo reflexionando sobre el
motivo que nos condujo a la división. Sé que en tus ojos aún
existía amor y en los míos una pasión tan cálida, cierta y
peligrosa que no he logrado controlar. Siento que aún estás viva,
pese a que muchos te dan por desaparecida. Puedo notar inclusive tu
cercanía y sé que el mundo se hará pequeño para ambos,
tropezaremos alguna noche y quizás no sepamos como comenzar una
conversación. Sentados frente a frente en silencio, tal vez rozando
nuestros dedos en medio de una biblioteca o simplemente aceptando que
en la misma ciudad hay dos vampiros milenarios a punto de comenzar
una acalorada disputa.
No quiero llenarte de reproches como no
deseo escuchar los tuyos. Sólo quiero rodearte con mis brazos, besar
tus pequeñas mejillas y rogar al mundo que esos instantes no
terminen. Sé que opinas que jamás he podido olvidarme de mi pasado,
pero ningún hombre logra quitarse la soga que le tienden en el
cuello. Y sin embargo tú también lo eres. Tú eres parte ahora de
ese pasado.
¿Cuántos siglos han pasado desde que
te vi marchar en aquel carruaje? ¿Cuántos han pasado amor mío? Ya
he perdido la cuenta. Sólo recuerdo tus ojos embarrados en lágrimas
y mi corazón derrumbándose. Amor mío ¿algún día volveremos a
tener la intimidad que nos rodeaba? Quiero abrazar tu cuerpo frágil
y trémulo. Necesito secar esas viejas lágrimas y enterrar el dolor
para que no pueda volver a ti. Por favor, regresa a mí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario