Lestat de Lioncourt
El amor no surge entre las cadenas.
No puedes obligarme.
No seguiré esta obscena carrera
hacia el idílico desastre.
Soy el ángel que cayó por voluntad.
Soy Lucifer, creo en mi propia lealtad.
No soy tentación, soy consecuencia.
No soy mentira, no soy apariencias.
Dios, has dejado de luchar.
Ya no escuchas, ya no hablas...
No me digas que aún nos amas.
No tomaré las armas.
No alzaré mi puño contra ellos
porque no deseo torturar almas
y tampoco abandonarlos pretendo.
¿Adónde fueron las manifestaciones de
poder?
¿Adónde fue tu luz?
¿Dónde está el camino correcto?
¿Quién carga con tu cruz?
Soy el ángel que cayó por voluntad.
Soy Lucifer, creo en mi propia lealtad.
No soy tentación, soy consecuencia.
No soy mentira, no soy apariencias.
Dios, has dejado de ser todopoderoso.
Hay cientos allí que ya no te
veneran...
y es porque no eres Padre amoroso.
Jamás has escuchado sus corazones
y dices que son tus vástagos.
Nunca has escuchado sus oraciones
y de piedad no has tenido ni un amago.
¿Adónde fueron las manifestaciones de
poder?
¿Adónde fue tu luz?
¿Dónde está el camino correcto?
¿Quién carga con tu cruz?
No hay comentarios:
Publicar un comentario